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La alta comisionada de la ONU para los Derecho Humanos, Michelle Bachelet, pidió hoy a Honduras que garantice un ambiente propicio para celebrar unas elecciones en paz y transparentes, en las que los votantes puedan ejercer su derecho al voto sin miedo, pese a la violencia previa que se ha registrado.

Recordando que desde que las elecciones generales se convocaran en septiembre de 2020 hasta la actualidad han sido asesinadas 29 personas, expresó su preocupación por la violencia política en el país centroamericano y su oficina advirtió de que los comicios se celebrarán en un contexto «muy tenso y polarizado».

«Condeno todos los actos de violencia y llamo a los actores involucrados a compartir sus opiniones y preocupaciones de manera pacífica. La violencia no es, y nunca debería ser, la respuesta», destacó la expresidenta chilena en un comunicado.

Los hondureños «tienen derecho a votar en paz y a elegir a sus representantes sin sentirse inseguros, coaccionados o con miedo. Cuento con que todos los actores involucrados se comprometan con ello», subrayó Bachelet.

La oficina de ala alta comisionada denunció en la misma nota que muchos actores políticos han usado ampliamente «el discurso de odio como herramienta», también contra personas que defienden los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.

Bachelet pidió investigar de forma exhaustiva e imparcial todos los actos de violencia política, en los que han sido víctimas tanto personas ligadas al gobernante Partido Nacional de Honduras como a las dos principales fuerzas de oposición, el Partido Libertad y Refundación y el Partido Liberal.

La alta comisionada también mostró su preocupación sobre la restricción del espacio cívico en el país, donde integrantes de la sociedad civil y defensores de derechos humanos son regularmente acosados, perseguidos y atacados.

Desde el comienzo del año hasta la fecha, la delegación de la oficina de la alta comisionada en Honduras ha registrado 240 ataques en contra de defensores de derechos humanos y periodistas.