Honduras es uno de esos lugares cuya envidiable ubicación geográfica le ha servido para desarrollar, como ningún otro país en Centroamérica, múltiples destinos turísticos para satisfacer los gustos más exigentes de sus visitantes.
Si bien los mares intensamente azules del Caribe hondureño han sido por años uno de los principales atractivos, en los últimos años se le ha apostado fuertemente a la promoción de destinos culturales al interior del país asociados al pasado colonial.
Este ha sido el caso de Comayagua, ciudad que alberga cinco iglesias precolombinas y uno de los relojes de cuerda funcionales más antiguos del mundo, cuya fabricación se remonta al año 1.100;o Gracias, en el departamento de Lempira, al suroccidente del país, que una vez fue capital de la Nueva España, en cuyas cercanías se encuentra el Fuerte San Cristobal.
Todo esto sin olvidar que Honduras, tiene lo que se considera la capital cultural del mundo maya: Copán Ruinas. Esta pequeña ciudad que aún conserva calles empedradas, tiene a pocos metros la colección de pirámides y estelas mayas más rica de la Centroamérica precolombina.
La riqueza arquitéctonica de sus construcciones que servían como centro astronómico, y el entramado de glifos que constituyen su escritura, hacen que los expertos la equiparen con la mítica Atenas, y por ello fue declarada como Patrimonio de la Humanidad en 1980.
A la oferta prehispánica se ha sumado recientemente la enigmática Ciudad Blanca o Ciudad del Dios Mono, cuya existecia fue confirmada al mundo de la mano de National Geographic. Periodistas de esta publicación se sumaron a la expedición que hicieron expertos arqueólogos nacionales e internacionales, y un etnobotánico con un poderoso laser cartográfico para hacer un nuevo reconocimiento y decirle al mundo que no se trataba de una “ciudad perdida” sino una civilización desconocida hasta el momento.
Este sitio aún sigue inexplorado y su ubicación se mantiene en secreto para evitar el saqueo, pero la fascinación que despierta atre a muchos académicos que quieron sumarse a su estudio. A pesar de que el inicio convulso de 2018 contrajo significativamente la llegada de turistas en los primeros dos meses de ese año, los datos del Banco Central de Honduras al tercer trimestre trajeron resultados halagadores al reportar un crecimiento del 4,7% en el rubro de restaurantes y hoteles, atribuidos principamente al aumento en las reservaciones para el feriado interno de octubre conocido como Semana Morazánica.
En declaraciones a la prensa el titular de turismo Emilio Silvestri, informó que en 2018 se recibieron 2,2 millones de turistas, de los cuales poco más de la mitad, 1,2 millones, fueron cruceristas.